ALMENDRO

1.Origen


Tiene su origen en las regiones montañosas de Asia Central. Se distribuyó por Persia, Mesopotamia y, a través de rutas comerciales, por todas las civilizaciones primitivas.

Se cultiva en España desde hace más de 2.000 años, introducido probablemente por los Fenicios y propagado posteriormente por los romanos, ya que ambos lo hicieron motivo de comercio. Su cultivo se estableció al principio en zonas costeras y actualmente está introducido en zonas del interior e incluso en zonas del norte, con clima no favorable.


2.Importancia económica y distribución geográfica


En el mercado de los frutos secos, la almendra ocupa el primer lugar tanto en mercados nacionales como internacionales. En los últimos años, se han multiplicado los almendros mediante injertos e híbridos seleccionados, consiguiendo enormes mejoras en el rendimiento de las cosechas.

La producción mundial de almendra, ha crecido paulatinamente en los últimos años, siendo EEUU el principal país productor, seguido de España e Italia. Ante esta creciente competitividad, dos factores se vuelven fundamentales en su cultivo, el aumento de los rendimientos por superficie y el mantenimiento uniforme de calidad.


4.Mejora genética


Una de las técnicas empleadas es la utilización de las ribonucleasas estilares y los alelos de incompatibilidad, a partir de esta técnica se diseñan cruzamientos y plantaciones comerciales de genotipos conocidos y posteriormente se selecciona la descendencia.


     

6.Floración


La época de floración en el almendro tiene una gran importancia porque influye directamente en las posibilidades de obtención de una buena cosecha, debido a tres factores fundamentales: la polinización, las lluvias y las heladas.


7.Climatología


Lluvia


La lluvia impide el vuelo de las abejas durante la floración. Las abejas desarrollan mayor actividad cuando la temperatura ambiente oscila entre 15-16ºC. Su actividad decrece al descender esta y se anula por debajo de los 10-12ºC. Tampoco realizan vuelos ni actividad si el viento es superior a 24 Km/h.

El efecto de las lluvias sobre el posible lavado del polen en la flor y con ello la imposibilidad de su polinización, parece ser según las estadísticas de producción, muy reducido.

     

Heladas


Problema reincidente en zonas del interior, lo que puede anular totalmente la cosecha en algunos casos.

La posición de la parcela también afecta a la incidencia de las heladas.

Para superar estos problemas, se han buscado variedades de floración tardía, además se recomienda cultivar en laderas soleadas, ya que permite escapar a las heladas y potenciar la actividad de las abejas.


3.Requerimientos Edafoclimáticos


Es una especie muy rústica, sobrevive en condiciones muy complicadas, aunque disminuye su rentabilidad. Poco tolerante al frio y muy tolerante a la sequía. Se puede producir en secano de 300 mm, pero la rentabilidad se asegura a partir de los 600 mm. Para llevar a cabo una buena polinización hay que tener en cuenta los factores climáticos que afectan a las abejas.

Prefiere suelos sueltos y arenosos, aunque vegeta en francos. Le son perjudiciales los suelos encharcados y pesados. No resiste la asfixia radicular y es muy susceptible a los ataques de Armillaria y Phytophthora.


5.Polinización


Debido a que el producto comercial del almendro es la semilla, esta cosecha solo se obtiene si los procesos de polinización y fecundación tienen lugar de manera correcta. Para ello se diseñará la plantación con variedades intercompatibles de floración simultánea, circunstancia que antes no era tomada en cuenta.

Las fechas de floración pueden ser variables según las condiciones climáticas, sobre todo las temperaturas, pero siempre la frecuencia de floración de las distintas variedades es aproximadamente la misma.

Se debe colocar un mínimo del 33% de polinizadores que coincidan plenamente en la floración con la variedad elegida, distribuidos en filas alternas y colocando de 4 a 6 colmenas por hectárea.

Actualmente, esta falta de coincidencia puede resolverse con la plantación de variedades autógamas, entre las que Guara está muy extendida.


9.Variedades.-


Son elegidas, según el criterio de fecha de floración, rendimiento en grano, sensibilidad a la aparición de frutos dobles.

Algunas de las variedades más empleadas:


-Marcona.- Considerada la variedad de mayor calidad a nivel mundial. Es muy productiva, de maduración tardía y requiere polinización cruzada. Fruto de cascara dura y semilla homogénea de forma redondeada. Árbol de vigor medio y porte vertical con floración de media estación a precoz.


-Desmayo Largueta.- Variedad española de producción media-alta. Requiere polinización cruzada, de floración precoz y recolección semitardía. Fruto muy duro y alargado, semilla alargada puntiaguda y algo plana. Vigor medio con mucha ramificación.


-Desmayo rojo.- Variedad española de flor tardía. Fruto muy grueso y compacto de tonos rosados y semilla alargada con punta compacta.


-Guara.- Variedad autocompatible de floración tardía y maduración temprana. Fruto con cascara dura y macrón y semilla bastante alargada. Vigor medio y porte abierto.


-Ferraduel.- Variedad francesa de floración tardía, muy productiva y recolección de media estación a tardía. Fruto de cascara dura y semilla elíptica, plana y ancha. Árbol de vigor medio alto.


-Atocha.- Variedad española muy productiva y con almendra de calidad. Floración de temprana a media estación. Fruto con cascara muy dura y alargada semilla elíptica de color crema. Árbol muy vigoroso y de floración muy abundante.


-Ayles.- Variedad autocompatible de floración tardía y maduración de media estación. Fruto con cascara dura y semilla acorazonada de alto rendimiento.


-Cristomorto.- Variedad italiana de floración tardía y maduración media. Fruto de cascara dura ovalado y semilla elipsoidal aplastada, con aparición de bastantes semillas dobles. Árbol vigoroso que tiende abrirse.


-Ferragés.- Variedad francesa muy vigorosa y productiva de floración a media estación. Fruto de cascara blanda y semilla alargada y abultada centralmente.


-Garrigues.- Variedad autocompatible y muy vigorosa. Fruto pequeño redondeado y semilla pequeña con alguna estría profunda. Árbol muy vigoroso y con poca ramificación.


-Nonpareil.- Variedad de floración semiprecoz, fruto de cascara blanda y semilla elíptico redondeada. Árbol muy vigoroso de porte erguido y con poca ramificación.


-Tuono.- Variedad italiana autocompatible y de floración tardía. Fruto grande y de cascara dura con semilla oblonga y apuntada en uno de sus extremos. Árbol de vigor medio y porte abierto tendente a pendular.


10.- Patrones.-


   

-Franco de melocotonero.- Se emplea en regadíos debido a que presenta una mayor tolerancia a la asfixia radicular. Algunos son resistentes a nematodos.


-Híbridos de melocotonero x almendro.- Dan excelentes resultados tanto en secano como en regadío. Resistentes a la caliza, sufren menos la asfixia, presentan muy buen vigor. Se propagan mediante estaquillado semi leñoso y son buena alternativa siempre que el precio lo permita. Algunos se venden como híbridos micropropagados.


-Ciruelos.- De utilización limitada a rodales con problemas de encharcamiento.


- Franco de almendro.- Muy barato y compatible. Presenta un buen comportamiento en secano. Buena adaptación a suelos calizos. Muy susceptible a Armillaria, Agrobacterium y Phytohpthora, sensible a la asfixia radicular. Heterogéneo para la propagación  sexual, por lo que se seleccionan semillas de un patrón muy concreto para una zona en particular.


11.Poda.-


El cultivo tradicional solo recibía la poda de rejuvenecimiento cada cierto número de años. Los planes de mejora han introducido nuevas técnicas de poda, además de recomendar variedades poco exigentes en poda.


En la poda de formación se tendrá en cuenta el marco de plantación, la mecanización del cultivo y la entrada en producción de la variedad elegida, así como el vigor y el hábito de crecimiento de la misma.


La poda de formación se suele realizar en vaso, pero también puede ser en espaldera. Posteriormente se llevará a cabo una poda de regeneración ligera, eliminando la madera muerta, las ramas mal erigidas y los chupones y se rebajaran los ramos mixtos a ramos de mayo.


10. Riego.-


              Responde muy bien al riego, aumenta su producción doblándola con facilidad y         regularizándola.   


              La mayoría de los almendros se cultivan en secano, pero las nuevas plantaciones son de riego localizado y sin limitación de agua, algunas reciben riegos de apoyo cuando la disponibilidad del agua lo permite.


              En riego por goteo se estima un consumo medio de 3.000 m3/ha. Para conseguir una buena producción.


              El periodo de mayores requerimientos hídricos es el comprendido entre el inicio del engorde rápido de la almendra y las fechas en las que esta alcanza su longitud definitiva, las necesidades disminuyen en los periodos anterior y posterior al señalado, pero no por ello se debe suprimir el riego totalmente.


              La reanudación de un volumen de riego normal 15-20 días antes de la recolección favorece el desprendimiento de la corteza de la almendra.


12.Abonado.-


Ha sido tradicionalmente muy reducido en secano, realizándose sobre todo en invierno y con aportación de nitrógeno durante el periodo vegetativo. En las plantaciones modernas de regadío normalmente se sigue un plan de abonado.


Deben realizarse análisis foliares para evaluar la evolución de los macro y micronutrientes más implicados en la productividad, ya que son frecuentes las carencias de Zinc y los problemas de Boro, tanto por exceso como por defecto. Los aportes de  abono nitrogenado suelen llevarse a cabo en primavera y en otoño para la floración del año siguiente. Se suele utilizar Sulfato amónico al 33,5 %, Superfosfáto de cal al 18% y Cloruro potásico al 50%.


13.Preparación del terreno


Se deben eliminar restos de plantaciones anteriores y limpiar los restos de monte bajo, ya que el almendro es muy sensible a la asfixia radicular y a los ataques de diversos hongos del suelo.


A continuación se realiza un desfonde profundo (70-90 cm), seguido de labores cruzadas, para favorecer el desarrollo de raíces y la entrada de agua de lluvia, además de poder aplicar el abonado de fondo.


Tras la preparación del terreno se procede al nivelado del mismo y seguidamente tendrá lugar un abalancado para la posterior plantación. En laderas de poca pendiente es recomendable plantar según las curvas de nivel.